"La felicidad no se logra con grandes golpes de suerte, que pueden ocurrir pocas veces, sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días"
(Benjamin Franklin )
Un gato negro se cruzó en mi camino ayer por la noche. Iba conduciendo, tarareando a Los Beatles con las ventanillas bajadas para no quedarme dormida. El viento movía mi cabello a su antojo y la luna resplandecía sobre el capó del coche. Y ahí estaba él, cruzando la carretera, con parsimonia inquebrantable.